El jefe comunal señaló que tanto el estado de excepción como la nueva Ley de Migraciones, entregarán mejores armas a los organismos públicos y Fuerzas Armadas en la lucha contra el tráfico de personas.
A un día de la toma de razón del estado de excepción para la provincia de Arica, el alcalde Gerardo Espíndola participó de un encuentro con otras autoridades regionales, de Fuerzas de Armada y de Orden, oportunidad en la que fue explicado el operativo que será realizado en la frontera para fortalecer el control migratorio.
Son más de un centenar de efectivos de todas las ramas desplegados entre los hitos 1 y 23, los cuales estarán enfocados a la detección de migrantes ilegales, su identificación y posterior reconducción hacia su país de origen. Dicha tarea es reforzada con mayor dotación tecnológica, comprendida por vehículos, radares y drones.
Tras conocer en detalle cómo será aplicado el reglamento de la Ley de Migraciones, el alcalde Gerardo Espíndola enfatizó que dicha medida permitirá robustecer la respuesta regional ante el aumento alarmante de bandas dedicadas al tráfico de personas, que pueden derivar en otros crímenes como el tráfico de órganos o las redes de explotación sexual.
“Que haya más presencia de las policías y del Ejército por supuesto que ayuda a enfrentar a las bandas de tráfico de personas. Es fundamental entender que los coyotes son el último eslabón de una organización mucho más grande, acá tenemos que atacar con todo a estas bandas que son tan peligrosas como las de narcotráfico”, señaló el jefe comunal.
Cargado de simbolismo
Para Espíndola, el decreto de estado de excepción en el norte de chile es la primera vez que el Estado reconoce la situación migratoria como una emergencia real. Hasta la fecha, la Municipalidad de Arica era el único organismo público a nivel nacional que había decretado emergencia por esta situación, un problema transversal que afecta desde Arica hasta Antofagasta.
Junto con ello, señaló que dicha medida venga apalancada con mayores recursos estatales, dado que actualmente la crisis migratoria sigue siendo un problema regional, un enfoque totalmente errado dado que la protección y administración de la frontera es un problema de Estado y no de una comuna.
“Es fundamental que, si se requieren recursos para poder aplicar la normativa, acá también vengan recursos del nivel central para poder afrontar esto. Hay que recordar que esta no es la frontera de Arica con Tacna, sino es de Chile con Perú y, por tanto, es un problema del Estado de Chile que tiene que tener las mejores condiciones del mundo, tanto para el personal del Ejército como de Carabineros, la Armada y la PDI para que puedan desarrollar un trabajo lo más óptimo posible”, enfatizó.
Por su parte, el general de brigada Guillermo Altamirano Campos, jefe de defensa nacional de la provincia de Arica, llamó a los migrantes que buscan ingresar a Chile a realizarlo a través de los pasos habilitados, pues hoy no existen las facilidades que la normativa legal permitía hasta la semana pasada.
“Quisiera expresar a todas aquellas personas que deseen ingresar a nuestro país, que lo hagan por los pasos habilitados, no por los pasos ilegales porque nosotros nos vamos a encargar de devolverlos al país de dónde vienen. Porque para eso existen las leyes y para esos están los pasos habilitados para poder ingresar a nuestro país de forma legal”, indicó.